El Embalse del Ebro tiene aproximadamente 120Km de costa cuando está lleno, en el año 2010 tuve la suerte de recorrerla íntegramente en motora durante 24 horas de navegación repartidas en tres jornadas con motivo de un trabajo, esta vez ha sido muy distinta, no había planificado nada, y he tenido mucha suerte.

Relato de una excursión singular por Campoo.
Hoy es San Mateo 2014, va a ser el último día de un larguísimo periodo cálido bajo predominio Sur, mañana acaba medio mes con una borrasca inmóvil en las Azores y se va a remover la meteorología peninsular.
Como parece que tengo todos los "permisos" en regla, voy a alejarme las rutinas del bullicioso San Mateo para visitar a mi barquito velero, los mundiales de Santander me han recordado insistentemente que tengo un barquito esperándome a la orilla del Mar de Campoo, y hoy no puede concluir sin que participe a mi manera en el Mundial, es un Cadete, www.cadetclass.org una clase pensada para niños pero que con un solo tripulante es bastante entretenido, le haré una revisión y si es posible daré un paseo. Aprovecharé para probar un mini motor de 2Hp de autorescate que debería funcionar después de 3 reparaciones.

El barco está bastante bien después de 4 años sin tocarlo, una vez pertrechado lo boto y pruebo el motor aprovechando que no hay aire, voy hasta Horna y vuelvo, el motor ha aguantado los 5Km a 6km/k y parece que levanta tímidamente el Este así que dejo la gasolina para hacer unos bordos a vela ciñendo lentamente desde Arroyo hasta Renedo. He salido a las 11:45, llevo dos horas al pairo viendo como lucen nubes grumosas en un cielo azul sobre un plató verde del hermoso Campoo, veo pasar las gansas, recibo las estimables visitas de una mosca y una araña voladora... pero es inminente un role a Norte que parece verse en el lejano horizonte hacia la Riba, así que vuelvo a poner el motor menos de 1Km y pegado a la lastra salgo hasta Bustamante donde llega aire frescachón. Es un NorEste suave y templado, hago unos bordos lentos para ir recibiendo cada vez mas aire hasta plantarme en el Puente Noguerol por el lado de Arija.
Llevo mas de 4 horas sin beber ni comer son las 15:45, veo que el Norte arrecia y una idea que lleva muchos años rondándome la cabeza es factible; cruzar de lado a lado el Pantano del Ebro en un barquito de vela ligera. La cabeza no deja de hacer cálculos; creo que si se mantiene Norte sin rolar a NorOeste podría hacer un largo de través hasta Cabañas de Virtus con bastante velocidad y regresar nuevamente hasta Arija de otro Bordo de través ligeramente portante... En todo caso si veo que derivo excesivamente siempre puedo darme la vuelta. Así que llegado hasta la draga de Arenas de Arija esquivo las boyas de acero y saludo al operario que no se siquiera me ve pasar. Ahora si, me meto en camisa de once varas con mi barquito Cadete en el Mar de Campoo que luce un verde oscuro e intenso con espumas en olas de cachaba y media... veo que el barco galopa con un noble viento laminar que me da mucha seguridad y mas diversión.

Metido en medio de esta gran masa de agua dulce parece que no tiene nada que envidiar a los mares, los pueblos se ven lejanos y apenas puedo distinguir más o menos en el horizonte hacia donde poner rumbo para llegar a la zona que intuyo mas lejana en cabañas, llevo GPS pero solo puedo verlo fugazmente cuando hay calma, en el barco me faltan manos.
Poco a Poco empiezo a distinguir las Autocaravanas y velas de Kitesurfistas y finalmente paso entre ellos para tomar tierra unos instantes, pretendo hacer una foto con el móvil y llamar a casa pero según lo saco se me vuelca el bote estanco y se me moja todo, así que dejo un mensaje en el buzón y me apresuro a regresar que va a serla fase mas dura e insegura, por el cansancio y porque si se para el viento o baja mucho no conseguiré llegar.
Vuelvo la inmensidad, al poco aparece Roberto navegando en paralelo por sotavento para cruzar unas palabras y nos despedirnos, a pesar de que el cuerpo ya empieza a avisar trato de relajarme y disfrutar de una navegación tensa y rápida entre las olas que empiezan a ser rompientes, llevo un rumbo de través menos ceñido que a la ida. En una hora llego al Puente Noguerol que es un paso a dar con cuidado de no golpear una columna oculta. Aunque ha bajado un poco la fuerza se mantiene un viento fresco con el que doy el único tramo ligeramente portante hasta Bustamante donde baja repentinamente para quedarme otra vez a merced de las calmas y pequeñas brisas que trato de ir aprovechando. El tramo de Renedo hasta La Aguilera se me hace interminable y empiezo a notar malestar, mareo, frío y cansancio. Finalmente aunque quería llegar a vela hago con el motor 1Km hasta pasar La Lastra y allí cazo de nuevo un norte flojo que amenaza con rolar a Oeste para llegar finalmente tras mas de 8 horas y 48 Km al punto de partida, completando así la circunnavegación del Mar de Campoo en un pequeño barco velero.
Tras desarbolar y entibar los aparejos, limpiar, cambiarme de ropa me dispongo a volver a Reinosa donde trataré de socializar sin que se note mucho que tengo la cabeza en otro sitio...
El Pantanero.